7 maneras fáciles de ayudarlo a comer cuando la idea de comer lo enferma
Muchas personas dicen constantemente que quieren perder peso, desearían poder comer menos o desearían no tener hambre tán frequente. Yo fuí una de ellos, pero así es como aprendí de la manera difícil a tener cuidado con lo que desea. No fue de la noche a la mañana que perdí el apetito, tomó meses. Así que no pensé que era gran cosa.
Al principio, pensé ‘¡Genial! ¡Finalmente puedo perder peso y no tengo que constantemente planificar mis comidas todo el tiempo!’ Pero con el tiempo empeoró más y más hasta que llegué al punto en que pensar en la comida me daba náuseas. Así descubrí que tengo la enfermedad de Crohn. Entonces, como alguien que ha tenido el peor apetito posible, permítanme compartir con ustedes cómo lo manejo:
1. Hable con su médico:
Primero, debe averiguar qué está causando su falta de apetito y crear un plan con su médico sobre cómo lidiar con la causa. A veces el tratamiento puede tardar en tomar efecto, entonces mientras tanto, hable sobre como tratar los síntomas, como las náuseas o el reflujo ácido.
2. Comidas pequeñas y platos diferentes:
Lo primero que la mayoría de la gente le dirá acerca de cómo lidiar con la falta de apetito es comer comidas más pequeñas. La parte que no le dirán es cambiar el tamaño de su plato. Para algunas personas, los platos más grandes pueden hacer que las porciones se sientan más pequeñas y fáciles de comer, pero para otros como yo, los platos grandes pueden hacerlo sentir como más. Lo peor que se pone mi apetito, lo más pequeño el plato que uso. Cualquiera que funcione para usted, el objetivo es hacer que sea más fácil comer más al hacer que la porción se sienta más pequeña.
3. Comida ricas en nutrientes:
Si aún puede comer diferentes comidas, opte por los que tienen más proteínas, nutrientes, o calorías (según sus necesidades). Por ejemplo, si necesita proteínas, llene su plato con más carnes, huevos o frijoles. Los vegetales de hojas verdes oscuras le darán muchos más nutrientes que algo como pepino o apio que es más agua. Los postres pueden no tener muchos nutrientes, pero tienen calorías y eso también es algo que su cuerpo necesita.
4. Coma lo que quiera:
Sí, ya sé que el tema es no querer comer, pero si su apetito llega al punto de ser tan malo que solo quiere comer una comida al día, cualquier comida es bueno para usted. Las pocas veces que tenga antojo de algo, ¡comalo! Si todo lo que quiere comer es un puñado de dulces y galletas, hagalo. Si quiere comida de calle en vez de una comida casera, consíguela. La comida chatarra es mejor que no comer.
5. Siempre tenga golosinas:
¡Las golosinas puedan ser sus amigos! Las galletas saladas, los cereales y las barras de granola son excelentes opciones que puede tener a mano dondesea. Y cuando digo siempre, me refiero a ponerlos en todas partes para que siempre tenga algo al alcance. En su bolso, su carro, su escritorio, hasta su mesa de noche. Cuanto menos tiempo le tome conseguir comida cuando finalmente se le antoje, mejor.
6. Beba sus calorías:
Comer es muy difícil a veces, pero beber podría ser más fácil. Las bebidas de proteinas, los batidos y los helados son excelentes opciones con más sustancia cuando las comidas se sienten muy pesados. Las bebidas deportivas también son una excelente opción para ayudarlo a obtener electrolitos.
Si quiere algo salado, puede tomar caldo de pollo (o cualquiera que sea su carne favorita) o caldo de verduras, o liquar su ensalada y hacer un batido. Las sopas son otra manera de tomar las calorías, pero si se sirven como una comida, pueden sentirse más pesadas. ¡Una forma de solucionarlo es poner la sopa en una taza! Puede parecer extraño, pero lo que importa es que tenga algo en el estómago.
*Bono: ¡Los sorbetes pueden ayudarlo a beber más líquido a la vez!
7. No coma solo:
Nosotros, los humanos, somos criaturas sociales. Cuando coma, tenga a otra persona que coma con usted. Teniendo una conversación mientras coma también puede ayudar a distraerlo para que no se de cuenta de cuánto está comiendo. Además, es una buena manera de levantar el ánimo.
Hable con su familia y amigos sobre los problemas por los que está pasando para que puedan ayudarlo. Obviamente, no pueden comer por usted, pero pueden ayudar a animarlo a comer uñas mordiditas más. La comunicación también puede ayudar a evitar comentarios incómodos que vienen de la ignorancia.
Al fín, es importante acordarse que la experiencia de cada persona con enfermedad es diferente. Lo que funciona para una persona puede no funcionar para otra, y puede tomar un poco de prueba y error para encontrar el enfoque adecuado para usted. Pero si se mantiene informado sobre su condición y trabaja en colaboración con su equipo de atención médica, puede encontrar formas de controlar sus problemas de apetito y sentirse más en control de su salud y bienestar.